Reseña: Aladdin (2019)

Por Quique Ortega

Hoy es el turno de «Aladdín», el nuevo «live action» de Disney basado en su increíble película animada de 1992. No se si «basado» sea el término correcto, ya que es prácticamente una copia fiel de la original con una que otra modificación en la historia para no aburrirnos tanto. ¿Estuvo buenaza? Les platico.

Una de las principales misiones de las películas es hacernos sentir que lo que estamos viendo es real, Aladdín fracasa con todo. Durante la mayor parte del fime, podía sentir (literal) como los actores se encontraban en un set escupiendo sus diálogos debido a la mala dirección de Guy Ritchie (Snatch) y la exagerada dependencia al CGI. Al parecer, el señor no estaba muy inspirado mientras adaptaba esta gran historia, y todo terminó por sentirse artificial.

Hablando de artificial, el genio de Will Smith se ve tan chafa que distrae. En vez de poner atención a su nueva iteración del personaje, estaba más atento en ver su cara sin expresión y sus ojos de tirolico mientras imitaba a Robin Williams. Afortunadamente, lo imita sin pasarse de la raya y le mete un poco de su cosecha para que no se sienta como un refrito de dos varos. Aun así, los momentos donde cambia su apariencia a la de un humano son divertidos. Smith tiene mucho carisma y le dan algunos breves momentos donde brilla con su excelente naturalidad para la comedia. Tristemente son pocos.

También tenemos que hablar de los demás personajes. De Aladdín pues no hay mucho que decir. Por momentos chafea en su actuación y no hay mucho cambio al personaje de la caricatura, pero en general bien. Jazmín, por otro lado, si tiene su cambio obligado a la Disney: ya no ser la mera «damisela en peligro buscando al hombre de sus sueños más guajiros». Ahora, quiere ser sultán y proteger a los más pobres. Es un cambio padre, inclusive se echa una rolita nueva sobre el silencio de las mujeres en un mundo gobernado por los hombres. Pero que creen, no tiene mucho impacto, ya que esta parte de su historia no es muy importante. De vez en cuando te dicen que sus pretensiones son mayores, pero todo muy aislado. Finalmente Jafar, lo peor de la película. Pusieron a un jovencillo que no es muy intimidante que digamos. Se la vive gritando y sobreactúa durísimo. Además, sus motivaciones no quedan muy claras.

Pero no todo es malo, la película se termina salvando porque la historia siempre ha sido buena. Las escenas musicales están bien montadas y son bastante entretenidas (solo criticaría la de «A Whole New World», donde impera el pésimo CGI de la película). Al final hay una secuencia de acción bastante buena y los intercambios entre Aladdín y el genio están padres.

Para concluir, reitero, qué mal se ve el genio. Neta. Después de ver a Thanos en «Avengers», no puedo más que preguntarme si los responsables de su creación se quedaron jetones o les dio una pereza marca ACME. Estas versiones «live action» de los clásicos de Disney se sienten más como máquinas de hacer dinero que otra cosa. Nos entregan productos ni muy muy ni tan tan. Películas palomeras tirándole para abajo. Como Aladdín. No se les olvide que ya se viene «El Rey León» en junio. Una más por si son fans.

Calificación [6.0]