RESEÑA / «Star Wars: El Ascenso de Skywalker»

Por Quique Ortega

Nuestros, hasta ahora, no muy interesantes héroes de la nueva trilogía se dan un tirito con el Emperador Palpatine que, sorpresivamente, no está muerto después de haber explotado en millones de pedacitos en el reactor de la segunda Estrella de la Muerte. ¿Por qué? Ni se lo pregunten, acéptenlo y disfruten de esta película que, si bien tiene sus buenos problemas, es un buen final a la saga de los Skywalkers que viene contándose desde 1977 (ya llovió).

Mencioné «sus buenos problemas» porque la primera parte de la película los tiene (no hay que hacernos weyes). Son errores en el guión donde la trama se centra en los personajes buscando y encontrando cosas o personas durante 45 minutos. El diálogo se limita a la exposición, a explicarnos para qué necesitan encontrar equis cosa y dónde está. Sí, se siente un poco atascado y hay trama por todos lados pero termina por entenderse perfectamente (gracias a Dios). También hay cosas que ocurren demasiado convenientes, ya saben, para que la trama avance. Hay escenas largas y armadas solamente para que un personaje le pueda decir algo a otro…en fin (saben a lo que me refiero). Lo importante es que logra mantener una narrativa coherente y a sus personajes evolucionando, unos más que otros, en situaciones interesantes. Además, todo se intercala con impresionantes secuencias de acción y escenas tan originales y bien armadas que me dejaron con la bocota abierta.

Una vez que el «busca y encuentra» termina, la película despega de manera impresionante con una madriza ruda y bien puesta en los vestigios de La Estrella de la Muerte entre Kylo Ren y Rey (no hay spoiler, se ve en el trailer amigos). No solo es lo impresionante de la pelea visual, conceptual y coreográficamente, sino la historia detrás. Si algo hizo bien Rian Johnson en su infame “Episodio VIII: Los Últimos Jedis”, fue desarrollar una fuerte relación entre los jovenazos Rey y Kylo Ren. Afortunadamente, J.J. Abrams encontró la llave y continuó con este fuerte lazo para darles un final digno a los dos. Lo mejor de todo, es que finalmente hizo de Rey una heroína auténtica, con un trasfondo importante y algo por lo cual pelear (bien pero tarde caray). Y Kylo, bueno, ha sido un gran personaje desde el inicio, con su personalidad de emo y sus arranques de adolescente con sarampión revolucionario. Ahora, lo vemos en total control y más poderoso que nunca. Arco completo y redondo para el mejor personaje de la trilogía (además, vaya actorazo que es Adam Driver).

La historia en su totalidad es bastante común y se fueron literalmente a la segura. La realidad es que no tomaron riesgos para impactar a la audiencia. Las revelaciones importantes se dan en los momentos justos y por lo general están bien justificadas; a excepción de algunos usos de la Fuerza que se sienten más por conveniencia de la historia que por expandir más el mítico misterio de la misma. Ya saben que en esta nueva trilogía ya todo mundo hace uso de la Fuerza sin pedo alguno, y si hay que solucionar algo, se inventan un nuevo, increíble y hermoso poder. Aún así, está muy chingón lo nuevo que hacen. Pregúntenle a Kylo Ren.

Finalmente, aunque la película me gustó, debo confesar que siento un poco de lástima. Se ve claramente que Disney y J.J. Abrams hicieron hasta lo imposible por contentar a la fanaticada que aborreció la película previa. Es como una carta de perdón para los fans. Inclusive ignora bastante “Los Últimos Jedis” (la anterior) y por momentos hasta se toma el descaro de “arreglar” algunas cosas de la misma. Es tan obvio que hasta da un poco de risa. Por mi parte, doy las gracias, soy un detractor de la película pasada (aunque también le admiro varias cosas).

Pero que creen, también siento coraje (jaja). Al hacer esta trilogía al chilazo, es decir, sin escribir toda la historia previamente y no tener una mente creativa detrás, hay muchas cosas que empezaron a hacer bien hasta ahora. Digo, cómo es posible que hasta la última parte de la historia le des trasfondo o desarrolles a tus héroes, cómo es posible que hasta la última parte hagas de Rey un personaje que vale la pena, cómo es posible que hasta la última parte decidas crear una dinámica importante entre los héroes principales. Amigos, Disney se equivocó en la estrategia y nos termina entregando una trilogía parchada y algo forzada, por más que funcionen algunos recursos improvisados para la película en cuestión. Digo, nada más hablemos de El Emperador, con el simple hecho de traerlo de vuelta, estás minimizando el final de “El Regreso del Jedi” y el noble sacrificio de Luke Skywalker y Darth Vader. Pero por otro lado, de dónde demonios sacas a un villano importante para la ÚLTIMA película de la saga, si tu director pasado lo mató cual torpe.

Pero bueno, más allá de mis sentimientos hacia la trilogía en general y lo que está película significa para la misma, El Ascenso de Skywalker, sí, tiene sus problemas, pero ya lo dijo mi amigo Allan: “No hay que verla con la cabeza, sino con el corazón”. Es entretenimiento puro y, lo más importante de todo, es que por fin lograron hacer una película que huele y se siente a Star Wars. Lástima que lo hicieron tan tarde. Aún así, no me quejo del final…

CALIFICACIÓN [8.3]