Reseña / The Good Place

Por Gusano (crítico invitado)

Antes de que el coronavirus a nivel mundial acabe con todo vestigio humano, quiero iniciar mi participación con Hijos del Cine, recomendando y escribiendo acerca de series y películas que, a mi consideración, merecen ser vistas por su valioso contenido temático y filosófico. Una de ellas es por supuesto The Good Place o El lugar bueno.

Imagina despertar en una sala de espera, no recuerdas absolutamente nada. Estás a punto de tener la epifanía más importante de tu vida, donde se te informa que acabas de morir y que, de acuerdo a un sofisticado sistema de puntuación, has logrado ingresar al Nirvana. Pero no se le conoce con ese nombre ni con ninguno otro que hayas escuchado antes, simplemente, es el Lugar Bueno. Un lugar donde pasarás el resto de tu existencia espiritual, acompañado de la misma imagen corpórea que usaste en tu última vida terrenal. Incluso, seguirás usando ropa e interactuando con muchos de los aspectos banales de la dimensión tridimensional.

Un suburbio típico de la clase media – alta de Norte América, conocido como el Vecindario,  será la localización de tu permanente y grata estadía por los siglos de los siglos. Comienzas a conocer a los que serán tus camaradas, cómplices y amigos perennes. Se te muestra tu residencia y los alrededores del lugar. Pero así como dicen que el diablo se encuentra en los detalles y el Infierno esta edificado de buenas intenciones, pronto descubres que hay sutiles señales que te indican que ese sitio no tiene nada de grato  ni paradisiaco. Y que lejos de ser el paraíso prometido, es un sofisticado lugar de tortura.

A la manera de la célebre novela A Puerta Cerrada del filósofo francés  Jean Paul Sartre (1905 – 1980), las situaciones se tornan sofocantes para sus protagonistas. “El infierno son los otros”, de ser una comunidad conformada por cientos de personas, pronto descubres que tan solo 4 de los personajes que aparecen en la serie adquieren relevancia e importancia. Que tan solo 4 personajes cuyas peculiaridades, actitudes, conductas y vivencias se irán desarrollando a lo largo de las 4 temporadas, llenas de comedia negra, drama y de profundas  reflexiones existenciales, éticas y culturales.

Cierto es también que a pesar de contar con las extraordinarias actuaciones de Ted Danson (CSI), Kristen Bell (Frozen)  y William Jackson Harper (Midsommar) a lo largo de todas las temporadas, pronto los escritores caen, por momentos, en un limbo de bloqueo creativo que hace que la serie pierda interés y frescura . Pero de verdad, les digo que sobrellevando  y sobreviviendo a  ciertos episodios realmente aburridos y absurdos, la serie tiene una conclusión genial que finalmente nos hace sentir que hemos llegado al Lugar bueno.

CALIFICACIÓN [7.0]